Su estado de salud al principio era el siguiente concretamente:

• Cansancio y fatiga permanente, tiene que estirarse a menudo y hacer una siesta.
• Ha sido anoréxica con depresión cuando era joven. Tiene tendencia a la depresión, humor cambiante, cólera sin motivo y ha tenido 3 burnouts.
• Carencia de vitamina B12, baja vitamina D, toma una alta dosis de magnesio desde más de 20 años.
• Ve manchas como moscas desde la adolescencia.
• Hipersensibilidad a los ruidos
• Empastes metálicos (amalgamas) y bruxismo.
• Ulceras en la boca hasta sangrar desde hace años.
• Lengua siempre muy cargada y blanca, incluso negra.
• Comisuras de los labios que se abren y queman, lengua que quema también.
• Dolores de estómago. En los ataques hay náuseas, espasmos, siempre se siente llena y pesada aunque haya comido poco. Tiene un poco de acidez y reflujjo. Según lo que come se levanta por la noche y no puede dormir. Aunque haya comido bien, puede sentir todavía hambre aunque no tenga ganas de comer.
• Tiene calambres por la noche.
• Sufre estreñimiento.
• Algunos días puede tener el vientre muy hinchado.
• Tiene a menudo espasmos, y puede tener ataques de diarreas líquidas como agua.
• Tez blanca, ojeras marcadas.
• Sufre desde hace años de dolor en todo el cuerpo, calambres por la noche y según la posición también dolor de cabeza. De vez en cuando tiene migrañas, ha sufrido vértigos y puntos negros en la vista.
• Desde hace 2-3 años tiene hormigueos en todo el cuerpo que se han vuelto permanentes y son como una acidez en músculos y tendones, y las articulaciones son dolorosas. Desde hace algunos meses los dolores son tales que no puede moverse y tiene que estirarse regularmente.
• Toma inyecciones de vitamina B12, una mezcla de aceites esenciales, magnesio, probióticos, vitamina D, y analgésicos.
• Ha intentado la homeopatía, acupuntura, osteopatía y terapias energéticas.
• Es vegetariana sin gluten y muy poco azúcar. Desde la adolescencia ha intentado diversas dietas y cambios alimentarios, sin ningún resultado.

Empezamos con un régimen higienista con una detoxificación que consiste en comer solamente fruta fresca. Después, se introducen progresivamente las verduras, frutos secos y algunos frutos grasos, y finalmente tubérculos, quinoa y trigo serraceno.
Su estado 6 meses después es el siguiente :  Han desaparecido los desórdenes gastro-intestinales, el vértigo, la fatiga, la depresión y los cambios de humor, el dolor y la migraña ; y ha  tenido una gran mejoría de los calambres, hormigueos y manchas delante de los ojos.
Aunque está atravesando una época de mucho estrés, ahora puede soportarlo muchísimo mejor. Con el estrés algunos síntomas han vuelto, pero mucho más leves que antes.
Ella explica las mejoras en su estado de salud de esta forma:
« El tercer día de la detox, fue increíble. Una energía y ganas de vivir que no había conocido desde años. Es increíble como los cambios de dieta han influido mi energía. No habría podido aguantar el período de gran estrés que atravieso en este momento. Aunque todo no está al 100%, se que estoy en el buen camino.
De la misma forma que la energía y las ganas de vivir, también viene la calma interior. Ya no me siento arrebatida por las emociones, ahora las puedo controlar.
Paso largos períodos sin ver manchas en los ojos.
Una gran mejora en la sensibilidad a los ruidos.
He podido estar semanas sin úlceras ; en 6 meses he tenido sólo 3 pequeñas, lo nunca visto !
Durante el período de detox he visto inmediatamente un cambio en la lengua cargada. Después, con la alimentación más rica y el estrés se ha vuelto a cargar, pero nada comparable con lo que tenía antes.
Ya no tengo comisuras en los labios ni quemazón, ni en la lengua tampoco.
Desde el tercer día el dolor de estómago ha bajado notablemente, luego ha desaparecido durante meses. Ahora con el estrés ha vuelto pero mucho más ligero que antes, y sólo a veces.
Los ataques (nauseas, espasmos, etc.) depende de lo que coma. Todo lo que es muy graso, como los frutos secos, reacciono muy fuerte si estoy estresada o como muy rápido. Todavía es un punto débil
Nunca más de acidez ni reflujo
Los calambres de la noche han mejorado notablemente, aunque todavía suceden un poco.
El vientre muchísimo menos hinchado, aunque todavía un poco, sobretodo con los alimentos grasos en general.
Nunca más ataques de diarrea y espasmos.
Los dolores desaparecieron durante la detox y la reintroducción de verduras, frutos secos y cereales. Pero con el estrés han vuelto un poco, mucho más leves que antes.
No tengo migrañas, sólo una ligera tensión de vez en cuando.
Ya no tengo vértigos.
Notable mejora de los puntos negros en la vista, aunque vuelven de vez en cuando.
Debido al estrés, tengo una crisis de hormigueos, pero no he tenido desde la detox.
He vuelto a hacer « nordic walking » unos 30 minutos de 4 a 5 veces por semana y 2-3 horas el fin de semana. Antes no podía hacer nada de deporte.
Sólo tomo magnesio todavía cuando tengo calambres, y probiótico. En 6 meses sólo he tomado 2 analgésicos ; antes había llegado a tomar de 6 a 12 veces por día durante varios días. »
« Cuando tomo comida cocida, aunque sea vegetal, siento que mi sistema digestivo no está contento, digiere más difícilmente, quiere comida cruda !
Cuando vuelvo a mi fruta todo se calma, siento una gran diferencia.
Añadiendo algunas verduras crudas va bien también, pero no hay nada a hacer, la fruta es perfecta para mí, incluso si necesito cambiar y socialmente es más fácil si es variado.
Lo que querría añadir es la importancia de dejarse acompañar en un cambio alimentario. Nunca habría imaginado que comer según el higienismo pudiera aportar tantos beneficios, pero despierta muchos temores y dudas, sea por creencias, por presiones sociales, etc. Gemma, con sus conocimientos precisos, acompaña con calidad y atención. Responde a mis cuestiones, mis dudas, mis remarcas de forma profesional. Ella guía con respeto, sin imposición ni sectarismo, su apertura y su atención son un verdadero regalo ! »